29 diciembre, 2006

Año de nieves, año de bienes...

Feliz Año Nuevo para todos.

Noche Vieja

Se acerca la Nochevieja y el Año Nuevo. Días de celebración y buenos propósitos para el futuro.
A ver que os parecen estos:

Ama como si nadie te hubiera herido nunca.
Baila como si nadie te estuviese mirando.
Canta como si nadie te escuchara.
Vive como si el Cielo estuviera en la Tierra.


Felicidades

Para que sea un FELIZ AÑO NUEVO

LA OPCION DE BELEN

Navidad.

La Historia vuelve a ser José y María camino de Belén.
No encuentran posada.
Dios nace en una cuadra. Los pastores van a dorarle.

El Cristo de Belén es símbolo de esperanza.

El tremendo Dios del Anti­guo Testamento, ahora niño y envuelto en pañales, ya no nos asusta. Se parece a nosotros. Desde los brazos de María nos sonríe, nos trae paz.
Así es el Cristo de Belén.

Y también es pobre y ama la pobreza y a los pobres, los primeros invi­tados a contemplarle.
No podemos cam­biar el Evangelio. La Navidad indica cla­ramente la opción preferencial del Dios encarnado por los pobres.

Por mal que nos vayan las cosas, por muchas priva­ciones que nos impongan las contingen­cias de la vida, difícilmente experimenta­remos más pobreza que Jesús en Belén o más injusticias que las que soportó en Jerusalén cuando llegó su Pasión.

¿Seguiremos al Dios Niño y al Dios Mesías, al Dios Maestro y Señor que nos invita a participar en su Proyecto del Reino?

Si queremos que nos inunde la plenitud de Jesucristo, optemos por un corazón humilde y sincero, justo y misericardioso. La felicidad nos colmará.

Un abrazo

¡FELIZ NAVIDAD!


La costumbre de poner el Nacimiento o Belén, tan popular en España, se ha convertido en un signo de la presencia de Dios en medio del hogar.
La iniciativa par­tió de San Francisco de Asís. A su regreso de Tierra Santa, en 1224, tuvo la feliz idea de celebrar la Noche Buena de una manera más viva. En la iglesia de Greccio (Italia), donde tendría lugar la misa de Media Noche, preparó con animales un cuadro plástico del Misterio que sirvió de lección catequética para sus frailes y fieles de los pueblos vecinos.
Esta costumbre está hoy extendida por todo el mundo cristiano.
Saludos