17 junio, 2006

NADAL DERROTA A FEDERER EN LA FINAL DE ROLAND GARROS


El español Rafael Nadal festejó su nuevo título, el segundo, en Roland Garros en una recepción con la colonia española en la capital francesa y organizada por la embajada hispana en París. Nadal aguantó con estoicismo el aluvión de aficionados que le demandaban un autógrafo o una foto.

Horas después de levantar su segunda "copa de los mosqueteros", Nadal acudió a darse un pequeño baño de multitudes en la embajada española. En el exterior del recinto varios decenas de personas esperaron durante horas al tenista, al que recibieron con banderas de España y con gritos de "Bravo".

Ya en el interior varios números de la guardia civil tuvieron que proteger al joven jugador de Manacor ante la avalancha de aficionados que querían una fotografía, un autógrafo o simplemente estrecharle la mano.

El Secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzki, y el embajador de España en Francia, Francisco Villar, recibieron a Nadal, que paseo durante unos minutos por varios salones del edificio diplomático para recibir el afecto de la colonia española.

No sabemos la cantidad de autógrafos que tuvo que firmar, pero sí que le costó esfuerzo y sudor.

Mientras, en un restaurante de París le esperaban ansiosos sus padres, familiares, compañeros de profesión, como Alex Corretja o algunos amigos muy cercanos. Finalmente el campeón, con evidente cara de cansancio,llegó y pudo reponer fuerzas con su familia.